En términos generales, podemos decir que el interés es el precio que se paga (o se recibe) por prestar dinero. Tal es así, que muchos economistas lo consideran sencillamente como el precio del dinero. Sin embargo, existen muchos tipos de interés y pueden surgir consultas, especialmente si estás buscando adquirir un préstamo. Si tienes dudas sobre qué son los intereses, estás pensando en pedir un crédito o deseas saber qué opción es más conveniente para tus ahorros, no dejes de leer esta nota.
¿Qué son los intereses?
Una forma de entender sencillamente el concepto de interés, es pensarlo como el valor de usar dinero que no es propio, es decir, que pertenece a alguien más. Esto habilita dos puntos de vista contrarios. Por un lado, si eres quien pide prestado el dinero, el interés representará un costo por encima del monto que has requerido.
En cambio, si tú eres quien presta el dinero, la recompensa adicional que recibirás por dejar que alguien más disponga de él, es el interés. La forma de expresar el valor de este recargo es a través de lo que se conoce como tasa o tipo de interés.
¿Qué es la tasa de interés?
Así como los bancos cobran una tasa de interés como beneficio por prestar dinero, las personas colocan su efectivo en una cuenta de ahorro para ganar intereses. En el caso de los préstamos el interés es el costo que vas a pagar por pedir prestado dinero. Por ejemplo, si la tasa de interés es de un 8% anual y pediste un crédito de $5,000 entonces vas a pagar 8% de esa cantidad en el año. Si multiplicamos el 8% por $5,000 me va a dar una cantidad de $400 pesos que se traduce en el interés que costaría el crédito por los $5,000 pesos.
Al existir un mercado competitivo por ganar más personas que depositen sus ahorro y soliciten créditos, usualmente las tasas de interés se mantienen muy parecidas. Abajo vamos a explicar algunos de los tipos de interés que existen.
Tipos de interés
Es importante destacar que no todas las tasas son iguales. Las distintas entidades financieras aplican diferentes tasas tanto para sus préstamos como para los ahorros que se depositan en ellas. Así, existe lo que se llama la tasa activa, que la entidad cobra a sus prestatarios, y la tasa pasiva, que se paga por los ahorros.
Otro punto importante a tener en cuenta es si la tasa de interés que se ofrece está dando cuenta de un interés simple o uno compuesto. La diferencia entre estos dos conceptos es fundamental.
Un interés simple también llamado Tasa Nominal Anual (TNA) se aplica únicamente sobre el monto inicial del préstamo.
Un interés compuesto también llamado Tasa Efectiva Anual (TEA) se aplica tanto sobre el monto del préstamo como sobre los intereses acumulados.
Como, generalmente, los intereses se pagan mensualmente, la TEA se calcula a partir de los intereses que se van acumulando cada mes, sobre el saldo inicial. Por eso, el mismo producto siempre tiene una TEA mayor a la TNA.
Finalmente, también es importante considerar si las condiciones del préstamo incluyen una tasa de interés fija o una tasa de interés variable:
Una tasa de interés fija se establece en el momento de concretarse el crédito y se sostiene durante todo el período de repago.
En cambio, una tasa variable o flotante puede ir sufriendo modificaciones a lo largo del período de vida del crédito.
En general, la variabilidad viene dada por algún indicador económico (como puede ser la inflación, el tipo de cambio o la evolución del PIB, entre otros) o bien por una tasa de referencia que fija alguna otra entidad. Lee más sobre los diferentes tipos de tasa de interés para préstamos que existen.
¿Cómo calcular los intereses de un préstamo?
En la situación de pedir un préstamo, el interés es lo que tienes que pagar por disponer del dinero. Es decir, al cabo de la vida del crédito, terminarás devolviendo el monto que te prestaron más una cierta cantidad de intereses. Por lo general, la devolución del préstamo se realiza mediante pagos mensuales. En cada pago, parte del dinero se utiliza para devolver el capital, y otra parte para el pago de intereses. Incluso cuando la cuota a pagar sea siempre la misma, es probable que las cantidades destinadas a capital e intereses varíen.
En los casos de deudas renovables, como las de la tarjeta de crédito, debes tener en cuenta que puede aplicarse un interés compuesto. Como es posible seguir consumiendo y pagar solo el mínimo de la tarjeta, los intereses por el saldo restante se acumularán para el mes siguiente. Si esta situación se mantiene, estarás acumulando intereses sobre intereses, lo que puede convertirse en un serio problema.
Con las tarjetas de crédito es fundamental que prestes atención a los términos y condiciones. Es probable que la tasa de interés varíe al cabo de unos meses. Además, no siempre se cobra lo mismo para consumos, adelantos de efectivo u otras transacciones. Adicionalmente a la tasa de interés, muchas tarjetas agregan otros cargos, haciendo que el costo financiero total sea aún mayor.
¿Cómo calcular los intereses de los ahorros?
Cuando depositas tu dinero en una cuenta bancaria, tú le estás prestando el dinero al banco. De hecho, la función principal de los bancos es canalizar los ahorros de las personas a aquellos que desean pedir prestado. Entonces, el banco te ofrecerá una parte de las ganancias que obtiene con sus préstamos por el dinero que tú le has dado. Esa es la tasa de interés pasiva.
Es importante aclarar que la tasa pasiva no solo es siempre menor a la activa, sino que además puede variar considerablemente entre distintos bancos y productos. Por ejemplo, los llamados depósitos a la vista no suelen ofrecer una tasa atractiva. Esto es porque se trata de ahorros que pueden retirarse en cualquier momento, sin restricciones. En cambio, los depósitos a plazo fijo suelen estar congelados durante el tiempo que se estipula al comienzo: puede ser mensual, bimestral, trimestral, etc.
Durante ese tiempo, no podrás disponer de tu dinero. Esto permitirá al banco planificar más adecuadamente qué hacer con ese monto, por lo que la tasa de interés que ofrecerá en este tipo de productos suele ser considerablemente mayor. Además, si consideramos el interés compuesto, es posible que la ganancia que obtengas se vea aumentada al reinvertir los intereses generados en la renovación del depósito.
Como podrás ver existen muchos tipos de intereses. Si estás buscando adquirir un préstamo ya sea personal o para tu negocio, es importante que tomes en cuenta los diferentes tipos de intereses que existen y que conozcas la terminología alrededor de ello. Conocer la tasa de interés te permitirá saber cuánto es lo que terminarás pagando en total.